lunes, marzo 21, 2011

El agua y Mariana

Mariana siempre ha creído que sumergirse en el agua hace que su conciencia quede en paz y se lleve sus preocupaciones y tristezas.

Esa tarde llegó mas temprano de lo acostumbrado a su apartamento y subió directo a la piscina del edificio.
No había nadie, miró por los ventanales la ciudad que no paraba de girar. Observo aquellas pulgas caminando sin parar. Bocinas de carros y buses  adornaban el caos de esa jungla de concreto tan desordenada y feroz.

Se sentó en una de las sillas mirando hacia la piscina, se despojó de su bolso y su blackberry dejándolos encima de la mesa y clavó su vaga mirada en el agua.
Le gustó el olor a cloro que había en el lugar, cerro los ojos y mil problemas de trabajo, familia y amor empezaron a luchar para que Mariana pensara en soluciones. Se llevó las manos a su rostro y sin pensarlo, se levantó de la silla caminando sigilosamente a la piscina, empezó a jugar pica pala por el borde de la piscina y al llegar a lo mas ondo, se dio la vuelta observando como el sol empezaba a descender.

Escucho su celular sonar y sin pensarlo, se arrojó a la piscina.

Ese sonido siempre la devolvía a un estado que solo el agua lograba. Al sentirse completamente sumergida, grito.... cada uno de sus problemas, miedos y tristezas salía directo a morir en el agua...

La ciudad no paraba de girar pero Mariana ya no la escuchaba mas, estaba limpiando su energía.

2 comentarios:

Raul dijo...

Por tal motivo no fuiste a la boda... Esa pequeña llamada fue mía.

Alicia dijo...

Espero que Mariana sobreviva a sus problemas... y al agua... de otro modo ¿tendremos nuevas historias?


Saludos.

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