sábado, enero 29, 2011

Charla en el cielo

- Isabel Henriquez, Isabel Henriquez!
- Si, si, soy yo! -dijo la mujer presurosa mientras trataba de llegar al dueño aquella voz.
- Ok doña Isabel, usted podrá pasar a la sección de adultos en 3 minutos.
- Gracias, gracias!!

Isabel estaba consternada ante lo que sus ojos veían, era tal y como se lo imaginó. Observaba con detenimiento como la gente jugaba cartas, dominó, hacía ejercicio,otros pintaban o leían recostados en un árbol.
Por fin sentía tranquilidad e irradiaba serenidad. Sus preocupaciones se habían ido.

- Disculpeme señora - dijo una mujer finamente vestida, cabello corto y aroma a jazmín.- Disculpeme, pero cuando me contaron que usted había llegado, no quise esperar para poder hablarle - Isabel trataba de recordar ese rostro, ese aroma, pero por mas que escarbaba sus recuerdos, no lograba hallarla.-

- Si... pero tendrá que disculparme, pero no sé si es que mi cabeza todavía está algo confundida, pero la verdad, no sé quien es...

- Ah! si... bueno nosotras no nos conocemos, doña Isabel. Es solo que llevo mucho tiempo escuchando sobre usted y quería estrechar su mano y presentarme - mucho gusto, soy Valeria de la Torre, mamá de Mariana Rico. - terminó de decir la mujer esbozando una sonrisa y estrechando la mano de Isabel.

- Oh! señora, mucho gusto, definitivamente Marianita tiene su mismo rostro... tiene usted que sentirse orgullosa de su hija. No hay mejor mujer para mi hijo que Marianita....

-Muchas gracias doña Isabel y sientase en su casa. Bienvenida, si necesita algo o tiene dudas o preguntas, no dude en  buscarme.

- Gracias doña Valeria, la verdad como usted se debe imaginar, tengo mi cabeza hecha un enredo, ya no sé que es verdad y que es fantasía... pero sabe, ahora que me lo pregunta. Tengo una duda, lo logré?

- Jajaja si querida Isabel, lo logró! y tranquila, sé perfectamente lo que está pensando, sus preocupaciones y dudas. Solo déjeme decirle que todo va a estar bien, pero sino es mucho atrevimiento, le daré un consejo. Limpiese muy bien los pies, porque absolutamente todo, va a quedar en el tapete de la entrada de este lugar...

miércoles, enero 26, 2011

Rueda que Rueda y sigue la rueda

El aire está mas puro.
La sonrisa sale del alma.
Las manos están cálidas.
Los ojos recuperaron el brillo.
Ahora, la luna despierta con su brillo y acompaña a la hora de recoger los pasos.
El alma se reactiva con el sueño y se embolata con el tinto y el cigarrillo.
Queda poco tiempo, pero las hojas recuperaron su protagonismo.
La tinta morada siempre está hábida de ganar la carrera.

El frío envuelve las mañanas y pinta en las noches. El sol, distrae las tardes.

Ahora, cada día hay un millón de rostros desconocidos con un solo propósito.

La rueda se encarriló, los días son extraños y las noches de descanso.
Los pasos son largos, rápidos y solitarios pero con dirección.
La música acompaña, el ruido arrulla y el estres despabila.

Vida! vida! eso vida?
Qué es vida? mi vida es vida o tu vida es la vida?
Sabe usted qué es vida?
Con qué se adereza?
Cuál es la manera correcta de vivirla?
Dan ideas para vivir ''correctamente'' o simplemente los caminos trazados por las decisiones forman la vida?

Preguntas, preguntas, preguntas y mas preguntas, pero lo cierto es que el libro volvió a la mesa de noche, el despertador cumple su misión y el pasto reactiva las energías.

viernes, enero 14, 2011

Una reflex y una imaginación


Se llamaba Ángel, su madre siempre le gustó ese nombre. 
Ángel era hijo único de Roberta y de Gonzalo. Gonzalo, el padre de Ángel, había muerto cuando él tenía 8 años de edad.
Ángel y su madre se mudaron un soleado 22 de Agosto a un barrio modesto de casas, ubicado al occidente de la ciudad. La cual, se había comprado con el seguro de vida que el padre había pagado sagradamente cada mes hasta el día de su deceso.
Ángel era un joven de pocas palabras, pocos amigos y pocos intereses. Pero  un 15 de Febrero, día de su santo, su madre le regalo una cámara réflex marca Zenit, la cual, un mes antes había mandado a reparar donde un señor  recomendado por una de sus compañeras de trabajo quien le había comentado que cobraba poco y empíricamente, era capaz de arreglar desde licuadoras hasta lavadoras.
Ángel no se entusiasmo mucho con el regalo de su madre, así que la dejó en la caja en la que venía empacada hasta tres meses después de su cumpleaños.
Un caluroso domingo de Mayo, Ángel se encontraba organizando su habitación cuando encontró aquella caja la cual ni recordaba.
 Al abrirla, se desilusionó. Era aquella cámara vieja que su madre le había dado en su cumpleaños, pero esta vez, la miró con más detenimiento que la primera vez que la tuvo en sus manos.
Miró por el visor y automáticamente obturó el botón que estaba situado arriba al lado derecho y ese sonido que disparó, le gusto tanto que se aventuró a mover el lente prominente que salía del aparato, percatándose que de esta manera se acercaba más a los objetos que divisaba.
Volvió a obturar, salió a la sala mirando solo por el visor  y volvió a oprimir el botón cuando vio a su gato acostado en el sofá.
Cuando la madre llegó del trabajo, encontró a su hijo en el jardín mirando por el visor del regalo que ella con tanto esmero le había mandado a arreglar y se emocionó al ver que su hijo por fin se interesaba en algo que no fuera programas de televisión.

Entraron a la casa y al son de un buen tinto bien cargado, la madre se dispuso a enseñarle lo poco o anda que sabía de cámaras, ella, le contó que su padre le había obsequiado aquella cámara cuando ella tenía 14 años y el día en que estaba empacando las cosas para mudarse a esta nueva casa, la encontró pero estaba dañada, le comentó a su hijo lo mucho q la disfrutó de joven pero que al pasar los años, la fue dejando de lado y nunca más la volvió a buscar.

Ángel  no sabía cómo se debía poner el rollo a la cámara, por eso, la mamá le enseñó como hacerlo y al día siguiente resolvió ir a caminar por el vecindario con su nuevo juguete en la mochila.
El ruido de las bocinas de los carros lo aturdían y sin pensar cómo o porqué, sacó su cámara y tomó una foto.
Siguió su camino con destino al parque del barrio y se encontró con un bóxer  ladrándole. Lo enfocó y disparó. Siguió el camino de piedra y césped  encontrando un pequeño que lloraba porque su pelota se encontraba en la cima del  árbol de mango.
Miró por el visor, el niño giró su rostro y él obturó.
Al sentarse cerca a un árbol de eucalipto, se relajó y Ángel sonrió. Le gustaba su cámara, la miraba con mucho detenimiento, observando las ralladuras en su carcasa, imaginó a su madre dejándola caer o sin querer, rallándola con un ladrillo.
Ángel se percató que el niño había parado de llorar y le gustó saber que él tenía para siempre inmóvil aquel ser que jamás volverá a ver llorando en una imagen.
Ángel cerró los ojos e imaginó que ya ninguno de los carros estaban quietos en aquella avenida, pitando sin saber por qué. Una sonrisa de nuevo se esbozó en  su rostro, posiblemente, jamás volvería a toparse con aquellos carros, pero estaban para siempre plasmados gracias a él.
Ángel le pareció interesante saber que había capturado el momento pero no el ruido del llanto del niño o las 10 bocinas al tiempo sonando.
Desde ese momento, jamás dejó su Zenit en casa, desde ese instante, solo la dejaba para ir a bañarse.
La cuidaba como una mujer cuida sus joyas o un hombre su carro nuevo.
El día que se percató que había consumido las 30 fotos de su rollo, fue a mandarlo revelar pero el señor le dijo que si revelaba tres, le salía gratis uno. Así que Ángel decidió adquirir dos rollos más y esperar para llevar los tres a revelar.
Cuando estaba pagando, don Jeremías, el dueño y todero del lugar, se percató de la cámara del joven y comenzó a hablare al chico sobre la magia de la fotografía,  lugares cercanos a la ciudad para tomar fotos y sobre las nuevas cámaras que salieron al mercado con mejoras en sus máquinas.
Hablaron por más de 15 minutos, después, el chico se fue a su casa a almorzar con su madre.
Ángel tomó fotos en su colegio y le gustó sentirse poderoso, le gustaba capturar personas, momentos y  emociones.
 
Las niñas que antes ni sabían que existía, comenzaron a hablarle. No todos los días los estudiantes traían cámaras réflex al colegio. Se sintió aun más importante y hasta dejó que Rosita le tomará una foto.  Le agradó tenerla tan cerca de él y aun mas, mírala sonreír gracias a él.

Después de usar los tres rollos, Ángel fue con don Jeremías, pagó los 5 pesos que costaba la revelada y ahora solo debía esperar tres días para poder tener su versión del mundo hecha papel.
El día antes de ir a recogerlas, Ángel no pudo conciliar el sueño con facilidad, estaba ansioso. Días antes había comenzado a leer sobre fotografía y tenía miedo que encontrara magia en  sus en sus disparos ahora hechos papel.
Lo poco que sabía, se lo había enseñado su madre y el mes que había jugado a ser fotógrafo. Se acordó que el autor del libro afirmaba que la calidad del fotógrafo se mide cuando la obturación se convertía en papel.
Aquel esperado día Ángel salió sin  bañarse,  desayunó solo con un pan  y se fue a pie a recoger sus fotos.
Don Jeremías le dio gusto volver a ver al joven, muy pocos jóvenes a su edad son receptivos  al arte de la fotografía. Al cabo de dos minutos, el señor llegó con los tres sobres del muchacho.
Ángel  recibió los sobres  y al abrir el primero, se encontró con el retrato que le  había tomado Rosita. Después, con las de sus compañeras de clase hablando muy animadamente en el descanso, el árbol que habita en el paradero de buses, los pájaros tomando agua de la fuente de la plaza principal, los viejos riéndose en una banca del parque, los enamorados haciendo fila para entrar a ver  la Matiné, su madre cociendo a media luz escuchando la radio en la sala.
El muchacho no se percató que no era el único que hurgaba sus fotos, Don Jeremías detallaba detrás del mostrador cada una de las fotos tomadas por el chico y se alegraba. Desde el momento que lo vio con su cámara, supo que tenía ese ángel que se necesita para tomar buenas fotografías y estaba corroborando con  las imágenes del chico.
-          Muy bien jovencito! Tienes madera he! tienes madera..

-          Le parece don Jeremías?


-          Si chico! Mira, te voy a prestar este libro que compré ya hace varios años sobre fotografía. Era de un coreano que vino buscando batería para su cámara! Uff que fantasía esa cámara chico! Definitivamente estos asiáticos nos ganan en tecnología y nos mandan lo que ya no usan para nuestros pobres países jajajaja

-          Gracias don Jeremías!! Sabe, le he tomado aprecio a esto de la fotografía.

-          Se te nota! Y lo haces bien, estudia un poco más acerca de cómo se usa tu cámara para que le saques mas el jugo y verás como vuelvas!! Como un ángel – rio don Jeremías hasta ahogarse, sus pulmones empezaban a pasarle la cuenta de cobro por sus habanos -
La habitación del chico ahora era un hermoso collage de fotografías, sus nuevos amigos les encantaba ir a tomar onces a su casa porque siempre había una nueva imagen pegada en algún rincón de la habitación.
Su madre, había mandado a ampliar fotos de ella tomadas por su hijo y ahora las colgaba con orgullo en la sala y otras en su habitación.
Ángel siguió tomando fotos, siguió llevando su cámara a cualquier lugar y por eso, fue nombrado al llegar a sexto de bachillerato, fotógrafo oficial para el anuario Escolar. Lo que lo hizo más famoso y respetado por la mayoría de sus compañeros y gracias a eso, algunas de sus compañeras lo miraban con ojos de amor, pero él estaba muy ocupado matándose la cabeza para encontrando el ángulo de los jugadores de los equipos de deportes, de las porristas, de las maestros, de los niños jugando en el parque del colegio.
Al cabo de un año, don Jeremías lo empleó para que usara la nueva ampliadora que había mandado a traer de Corea.
Ángel amaba su trabajo, tenía que atender a los clientes, revelar las fotos y extasiarse con las imágenes que sacaban otros aficionados, madres, ejecutivos, jóvenes, enamorados y profesionales.
Pasaron seis meses y el universo lo despojó de su amada madre. Ángel creyó morir inmerso en su depresión, pero su trabajo, tomar la decisión de vender la casa e irse a vivir a un modesto apartamento y patrocinado por don Jeremías para culminar de estudiar en una Universidad Estatal la carrera de fotografía, aminoró el dolor de estar completamente solo.
Ángel se graduó con honores y ahora tiene publicaciones de sus fotografías no solo en los diarios de su ciudad, sino del país. Ya ha sido llamado por galerías especializadas en fotografía para programar  exposiciones con temáticas de sus fotos.
Ángel a pesar de ser exitoso, es un hombre solitario, que goza con la presencia de su gran Danes, Nikita, la visita de su viejo amigo Jeremías, quien jamás deja de asistir los domingos en la tarde para jugar una partida de dominó al compás de Hector lavoe y un buen zabajón.
Algunas veces lleva alguna mujer a su cama, pero definitivamente su gran amor siempre será su profesión.

Escrito por los cielos, acompañada de un hermoso atardecer y una coca cola helada.

miércoles, enero 12, 2011

Pureza vrs. Ideas

Abrumas con tu resplandor!
No lo niegues, sé que deseas que te convierta en arte.
Me desespera verte tan pulcra.
Deja de distraerme! mis ojos tratan de concentrarse en lo que mis pensamientos quieren plasmar.
Simplemente acá estás, retándome para de una vez por todas masacrar tú pureza!
Quién ganará esta vez? tu textura o mis ideas?
A caso tengo el derecho de matarte? A caso.. eso es cazar?

No huyas! pronto mis letras serán tu maquillaje, tus accesorios y tu ropa interior.
Déjame hacer mi trabajo! y entiende que ese blanco no combina con tus líneas.

domingo, enero 09, 2011

'' ECHANDO RULO '' CAP. 6

Alguna vez escribí que envidio la amistad entre los hombres, por qué? Pues bien, después de echarle cabeza y organizar mis argumentos para explicar el por qué pienso que los hombres tienen una amistad mas sincera que las mujeres, acá el decálogo mas dos!

1. Son capaces de mantener amigos de la infancia con los que casi siempre se les verá en rumbas.

2. No se mienten entre ellos, si al amigo no le queda el pantalón, camisa o zapatos, le dirán - Huy parce! cámbiese, ese jean no le queda-  porque no hay celos o pensamientos como: "Esa blusa le resalta los gordos de la barriga, así que yo levantaré mas esta noche.''  

3. Se cuentan cosas, pero no la faena completa.

4. Rajan un 25% menos de sus amigos a sus espaldas que las mujeres.

5. Tienen intereses parecidos como música, video juegos o deportes. Lo que hace que se vean más para salir a jugar basketball, football o jugar con la última consola de xbox que alguno compró.

6. Visitan tiendas específicas, tecnología o video juegos y generalmente compran. Nada de medirse mil prendas y no comprar nada. Certeros como el dardo.

7. Cuando tienen novia no se alejan de los amigos. Generalmente los domingos en la mañana es sagrado ''echarse un picadito de football''

8. Se ayudan entre ellos. Ya sea prestándose dinero, ayudándose a encontrar trabajo o pagando la rumba de esa noche.

9. Se dicen en la cara lo que piensan de la mujer con la que su amigo está saliendo. Si está buena, si les cayó bien o no.

10. Se hacen llamadas máximo de 15 minutos. Dónde se encontrarán, qué harán, quién lleva el carro, quién irá.

11. una falda jamás será mas importante que un amigo del alma.

12. A los hombres les vale cinco si su amigo esta mas gordo o mas delgado, las mujeres no les gusta ver a sus amigas más delgadas que ellas.


Quedan muchas en el tintero, pero estas 12 argumentan porque los hombres tienen una amistad más transparente, mas real, mas duradera que la de las mujeres.
Los hombres son capaces de pelearse y reconciliarse sin dejar rencillas. No se ven como posibles enemigos en una rumba, se ven como amigos, no como rivales en celo en busca de conquista.
Los hombres no se dejan de frecuentar cuando se enamoran, tal vez baje la frecuencia, pero siempre estarán en contacto.

Las mujeres desafortunadamente nos vemos con celos, hablamos mal entre nosotras, nos contamos todo, desde los cachos que le hemos puesto a los novios hasta la blusa de cien dolares que compramos en MANGO.
Y lo que me parece mas horrible, las mujeres se sienten superiores entre ellas cuando su amiga que siempre le ha ido bien ha perdido su trabajo o su novio la ha dejado.

Por qué? me lo he preguntado muchas veces, lo he discutido y no he llegado a una explicación. Solo sé que desearía solo por este ÍTEM de la vida ser hombre.

Por eso, tengo tres verdaderas amigas y 15 amigos.

Esta es la explicación del por qué dejé de salir a tomar café con cinco mujeres.

EDITANDO EL DECÁLOGO MAS DOS !



Ojo!  no todas las mujeres son asi, mi intención no es GENERALIZAR

Café, preguntas y fantasmas

La mujer terminaba su taza de café mientras observaba como aquella pareja se besaba apasionadamente.  Era inevitable no sentir celos, llevaba mucho tiempo sin besar a un hombre, su trabajo era ahora la prioridad en su vida - eso era lo que le había dicho a su alma para calmarla. -

Sus pensamientos empezaron a jugar y Antonio apareció después de tanto tiempo sin hacerlo en ellos.

Se hallaba sin querer pensándolo, pero se concentraba esta vez en sus labios.
A qué sabrían?
encajarían perfectamente con los de ella?
se excitaría mientras la besaba?
Serían suaves, calientes y carnudos?

Preguntas a las que jamás quería darles respuesta..
Ahora era un fantasma, quien todavía sin explicación alguna, no se quería ir.
Le encantaba jugar con sus pensamientos, aparecer y desaparecer, disfrutaba abrumarla con su presencia en los momentos mas inoportunos.

El último sorbo aminoró las preguntas, pagó la cuenta y decidió ir a caminar un rato.
Había decidido que al día siguiente iría a comprarse una mascota!

Leído en la emisora A.M Libertad, programa Iniciando la Tarde. Rosario Argentina.

Hace 28 años

 Esta vida juega algunas veces, de maneras que rayan entre lo cómico y lo aterrador. A qué escritor se le ocurriría que una madre muriera el...