Sin etiqueta, solo momento

Antonella saco de su bolso un papel doblado en tres y se lo entrego a Dario. -  Acá tienes lo que pienso de anoche.- 

- Anto! hablemos.. 

- No hay nada de qué hablar, lee esa hoja...

''Se que te has dado cuenta que soy una mujer particular, con ideas, locuras y ocurrencias que de seguro, ninguna de las que han pasado por tus manos te ha dicho o hecho...

Simplemente me gusta dejarte entrar en mi vida, que sepas que la salsa de tomate con huevo y arroz me encanta. Que  disfruto sentarme en la banca de la 11 con 93 y observar como el mundo gira sin que yo haga parte de el... 

Sabes que disfruto que sientas lo pasional que puedo llegar a hacer, combinando mi lado tierno con el travieso..

Sabes que amo que agarres mis caderas y te muevas atrás mio al ritmo de la música mientras tu nariz se aventura por mi cabello hasta llegar a mi cuello para capturar mi aroma...

Dario, no sabes lo que me encanta coger tu barba mientras nos besamos...

Lo sé, entre los dos hay buena energía... hay química!! sino, las miradas no se buscarían entre nuestros amigos para esbozar aquella sonrisa que delata un encuentro clandestino después de la rumba...

No entiendo porque te enredaste, simplemente dejo que las cosas fluyan. No me gusta poner barreras a los diferentes caminos que me ofrece la baraja de mi vida... simplemente disfruto de tu energía a mi lado..

Por qué te complicas? por qué piensas tanto... solo te pido que dejes hacer su parte a la vida, y que disfrutes de este tiempo que el destino cruza nuestras vidas.''

No preguntes mas.. y deja que tu alma me quiera por los días, semanas, meses o años que ella desee... 

Antho..!