"Y ahí estás... Dios... desearía ser el agua que corre por tu cuerpo... poder besarte mientras te ayudo a enjabonarte… pero no… tan solo estoy sentado en tu baño.. cuidándote para que no te pase nada.. amándote en silencio..
Siempre estoy a tu lado derecho.. protegiéndote.. tocando tu mano… sin que me sientas… susurrándote “cuidado” cuando pasas las calles sin mirar…
Porque.. porque!! Tuve que enamorarme de ti… porque.. eres tan prohibida… pero a la vez tan mia… estás en mis manos.. pero en brazos de otro…
Existió una noche en la que creí morir..
ahí estabas… en aquella sala ajena… tomando ron con él cerca de la chimenea…
él solo te besaba… te decía que te amaba y que quería que fueras su esposa, la mamá de sus hijos.. yo, solo estaba recostado en la pared que da a la calle y su ángel guardián se reía de mi…
“tonto como pudiste enamorarte… vas a sufrir y mucho porque jamás, escúchame bien, jamás la vas a poder tener”
Mi niña, mi mujer… duele tanto estar enamorado de ti… y no poder almenos intentar conquistarte… solo seguiré a tú lado… cuidándote… amándote en silencio..
Solo puedo jurar que como sea me verás…almenos.. en tus sueños…”